martes, 29 de enero de 2013

La hora del mar. Carlos Sisí

Hola amigos lectores de este blog. Hoy tengo el gusto de presentaros una novela que me ha dejado un sabor bastante dulce en el paladar. Bueno, mas bien salado debido al papel tan importante que tiene en esta historia el Mar. Y lo pongo con mayúsculas, porque a partir de su lectura, no lo veréis de la misma forma, igual que aquellos afortunados que fueron a visionar a su cine preferido Tiburón, de Steven Spielberg. El Mar guarda muchos secretos, y no solo cuando está bravío puede volverse peligroso. Ahora veréis por qué.

Unos días antes de la noche de San Juan, los océanos de todo el mundo se llenan de peces muertos. El fenómeno llama la atención de las agencias medioambientales, que no encuentran explicación alguna. A bordo del barco Vizconde de Eza, un grupo de biólogos y geólogos parten hacia el Mediterráneo parra realizar un informe, pero acaban asistiendo, con infinito horror, a una de las experiencias más increíbles de toda su vida.

Al mismo tiempo, los fondos marinos explotan: una cadena de seísmos submarinos asola los mares con fatales consecuencias en las costas. Esto, sin embargo, es sólo el principio de una serie de acontecimientos que pondrá a la Humanidad en jaque a medida que ésta se enfrente a un inesperado adversario: el planeta Tierra.


El comienzo de la novela creo que no puede ser mejor. Partiendo de una premisa como esta, podríamos pensar que la novela comenzaría con un ritmo desenfrenado y poniéndonos en acción. Pero no. Carlos Sisí ha evolucionado muchísimo su escritura tras escribir su trilogía de Los Caminantes, y ha aprendido muy bien en qué momento de la trama la velocidad debe subir o bajar. Aquí, da buena muestra de ello, avanzando por el comienzo de una manera sosegada y tranquila, poniendo énfasis en las cosas importantes y sin recorrer el camino de manera apresurada.

En el Capítulo de inicio, narra el primer indicio del fenómeno que va a poner los ojos de todos los habitantes del planeta fijamente en el mar. Además, aprovecha para presentar a uno de los personajes de la trama, que aunque al principio parece importante por lo bien que acaba siendo radiografiado, cuando llegamos al final, no es mas que una pequeña parte del enorme engranaje en el que acaba convirtiéndose La hora del mar.

La verdad es que la obra en sí es muy compleja en su concepción, mucho más en su creación, para poder unir todos esos rodamientos que Sisí va poniendo frente a nosotros de manera casi aleatoria (a nuestros ojos) pero que luego van encajando uno a uno de manera perfecta para acabar moviendo todo el mecanismo de una manera
unánime y homogénea. Escenarios tan diferentes como Málaga, Madrid, Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia... hacen que la novela gane mucho con el paso de los capítulos, ya que no se ancla en ninguno de los lugares expuestos, y vamos satando de uno a otro, agilizando así nuestra lectura.

Pero ¿Es tan importante el Mar en la historia? Sí, lo es y mucho. Mientras vamos devorando páginas y más páginas de la novela, vamos desentrañando los diferentes secretos que se esconden en la misma. Para ello, Carlos nos va exponiendo diferentes subtramas que se van entrelazando entre sí, y que la mayoría de ellas harían las delicias de los más acérrimos seguidores de las teorías conspiranóicas aparecidas en los programas y revistas mas sensacionalistas. Desde conspiraciones gubernamentales, avistamientos de Ovnis, comportamientos anómalos de la Naturaleza... Y muchas más cosas que prefiero no comentar para así no destripar la historia. La cantidad de tiempo empleado en la documentalización para su escritura ha debido ser bastante amplia, centrándose bastante en todo lo concerniente a los ejércitos de los paises involucrados.

El despliegue de medios bélicos que nos muestra la novela es bastante amplio, desde unidades motorizadas, aviones de combate, helicópteros, tanques, etc... pasando por unidades de infantería, marines, armamento de campo y cadena de mando del ejército, conociendo las más altas esferas del Gobierno español, haciendo alguna parada en el búnker del Palacio de la Moncloa en Madrid.

[SPOILERS]Y ahora paso a hablar de lo que mas me ha gustado de la novela: Los bichos. Sí, porque ¿Qué es Alien, el octavo pasajero sin su xenoformo? ¿Y Parque Jurásico sin sus velocirraptores? Evidentemente nada. Pues La hora del mar sin esos cangrejos gigantes fusionados con escarabajos peloteros, capaces de dejar achicharrado con una descarga eléctrica a cualquiera que se le ponga por medio, tampoco sería nada. Bueno sí, porque la novela brilla por su perfecta factura, pero los soldados de los ejércitos de La Tierra son de lo más originales. Huyen de cualquier imagen feroz e inteligente capaz de hacer sendas emboscadas a los humanos, o de urdir maquiavélicos planes llenos de malignidad y estrategia. Y huyen de ese estereotipo porque su concepción es precisamente esa. La de una mente colmena. En este punto, me recordó mucho a la novela de Michael Crichton, Presa, que trata tambien sobre algo parecido, pero con unos organismos artificiales que piensan de manera similar, y que precisamente reseñamos hace unos meses en el Blog. Unos animales capaces de acabar con cualquier creación humana siguiendo simplemente su instinto de supervivencia. Acompañados por unos seres a cada cual mas increible, la imaginación del autor para su concepción, no debe ser por menos que calificada de original. Para muestra un botón:

[SPOILERS]
"Su superficie se estremeció, aparecieron bultos que crecían y luego se desinflaban, y por fin, la parte delantera se abrió como una aberrante y descomunal vagina, dejando escapar una tromba de agua negra que se esparció por el asfalto."


Y ahora pasemos a los personajes. Ciertamente esta debería ser la parte que más adulara de la novela, pero por desgracia no es así. No es así porque para mi, ha primado mas la concepción de la trama y el perfecto engranaje de todos los factores que se dan cabida en ella, que la profundidad de los personajes. Con esto no quiero decir que los mismos sean planos, o que no tengan ninguna profundidad, porque no es así. Pero si es verdad que para ser una novela tan coral, no sobresalen sus
actores más que la trama, sino que están a su altura. Hay ciertas excepciones como Thadeus el biólogo, Rebecca la... bueno, Rebecca, y para mí el mejor de todos o al menos el que más me atraía, Pichou el analista francés. Aunque el enigmático Merardo o el calculador Koldo no se quedan a la zaga. Como véis, nombro bastantes de ellos, y eso es porque despues de todo están muy bien plasmados en la trama, a pesar de que no eviolucionen la mayoría en demasía. Pero creedme si os digo, que el único punto negro de la novela (dejémoslo en gris, y un punto casi minúsculo) pasa prácticamente desapercibido.

Al final, tras toda la novela, ésta te deja un ligero sabor amargo, porque el mismo es quizá demasiado precipitado, escaso en sus explicaciones de por qué ha ocurrido todo, pero claro, esa es la impresión subjetiva del que escribe, que o bien se ha podido deber a que yo no me he enterado bien porque soy así de cortito (que seguramente se trate de eso) o que simplemente el autor no ha visto necesario el profundizar mas en ello, sobre todo en el origen del ejército de cangrejos. Eso sí, las últimas quince páginas son para mi lo mejor, evocando el final de la novela de Esfera con esa conversación en su interior en el que... bueno, debéis leerlo y experimentarlo por vosotros mismos.

Por ello, para mi, una lectura algo densa aunque necesaria para poder entender todo lo que va ocurriendo en cada lugar del globo, pero absolutamente recomendable para aquellos lectores que disfruten de la novelas de ciencia ficción clásicas tipo Michael Crichton o Steve Alten. Además de una enorme crítica al daño que le estamos ocasionando al planeta y al que, quien sabe, pronto se le puede acabar la paciencia con nosotros, es un perfecto ejemplo de que en España hay verdaderos escritores de primer nivel, que no tienen nada que envidiar a los de fuera de nuestras fronteras. Desde aquí, este madrileño se ha ganado mi profundo respeto y a partir de ahora intentaré seguir su carrera literaria lo mas cerca posible.

5 comentarios:

  1. A ver..... Pon SPOILERS, por favor, he dejado de leer después de que es alien sin su xenomorfo??? La tengo en pendientes y casi me lo jorobas (bueno, un poquito, he llegado hasta escarabajos peloteros!!!). Cuando lo lea (que aún no lo he encontrado por aquí que esta agotado) terminare de leerlo y te comentare

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  2. No me gusta nada este tipo de historias, pero con una reseña tan fantástica me lo tendré que replantear.
    Felicidades!!!!
    Besindios.

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  3. A ver KAre, que no he puesto nigún Spoiler, o al menos no melo ha parecido, pero si tú crees que los son, los pongo entre Spoilers para avisarlo a todo aquel que se adentre en la crítica. Pido mil disculpas por ello.

    Montse, aunque te parezca icreible, hoy mismo he etrado yo mismo en tu blog, para leer tu crítica de La sangre de los farkas, porque yo tambien la tengo en cola, solo que me faltan aun dos libros para atizarle a esa, precisamente porque a mi tambien me lo ha enviado. Espero que te animes a leer este tipo de literatura, ya que a mi me pasa lo mismo con la que sueles reseñar tú misma...

    Un besazo a ambas.

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  4. Terminado.

    Me ha costado mucho leerlo, pero mis ojos hace unas semanas no aguantaban más de 20 minutos leyendo. Si exceptuamos que hace años que no tardaba tanto con un libro, me ha gustado bastante, sobre todo las 150 últimas páginas que han caído fulminadas en poco tiempo.

    Me ha gustado mucho los personajes (sobre todo la química, aunque creo que con sus conocimientos podía haber hecho más), lo de Rebeca...me ha recordado a una amiga que no sólo se llama así, sino que tiene también sus "prontos de locura".

    No me esperaba (o no quería) que se acabase como lo ha hecho, porque como bien dices, esperaba una explicación del origen de las Rocas Negras, pero no obstante y con eso, me ha gustado bastante!!!

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  5. Me alegro que en el fondo opines como yo respecto a la novela. Para nada me dejó un sabor amargo, solo que el final esperaba que me contara más, mucho más, pero solo por el egoismo puro y duro del lector, de saber el origen de todas y cada una de las cosas que aparecen en la novela. Pero quizás en este caso, lo mejor para la novela sea dejarla así, por si la explicación a todas las incógnitas no sacian nuestras expectativas.
    Guapa!!! Me alegro de que estés mejor de tus ojines, y te perdiste la presentación!!! Fue la caña!!

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